Los Comedy Wildlife Photography Awards (Premios de Fotografía Cómica de Animales Salvajes) han revelado sus finalistas, entre los que se incluyen pingüinos bailarines, monos que son guías turísticos y una sirena invertida exquisitamente extraña. Estas son nuestras fotos favoritas de la lista de finalistas del 2023, que de seguro que te alegrarán el día, y algunas de las mejores fotos del 2022 que vale la pena recordar.

Traducido al español por María J. Arabia, Editora de Sindicación en Español para loveEXPLORING.

Con las manos en los bolsillos y la cabeza gacha, este ganso parece un trabajador exhausto que vuelve a casa tras una larga jornada en la oficina. Ahora no, parece murmurar, ahora no.

Esta exhausta madre búho no ha dormido en tres noches. Y peor aún, parece que tampoco ha pegado el ojo durante el día. Qué difícil es criar adolescentes hoy en día…

No, no se le han pintado los ojos ni el pico, este animal es real. Ésta es una foto de un urogallo blanco, aunque parezca más una bola de nieve andante. 

Yoda, Gandalf y la tortuga de Kung Fu Panda, todo en uno, este cachorro de oso polar parece mucho más viejo y sabio de lo que es, apoyándose en su bastón. Pero no te dejes engañar: preferiría convertirte en el postre antes que darte sabios consejos. 

Esta foto fue tomada en el momento perfecto, casi podemos ver la ilusión en su rostro en pleno salto. 

En vivo y en directo desde el rodaje de Paddington 3... Estos oseznos parecen sacados de una película de Disney. 

Este zorro excepcionalmente formal tiene su propio proveedor de puros cubanos. El encendedor, el sillón y el vaso de whisky en las rocas están fuera de plano.

"Y si diriges la mirada a la derecha podrás ver el famoso 'ciervo de las nieblas' común o de jardín. Por favor, asegúrense de que el flash está apagado antes de fotografiarlo". Este guía solo quiere ganarse una buena propina al final del día.

Esta mamá y este papá alcatraz quieren tener el retrato perfecto. Por supuesto, su hijo adolescente no quiere sonreír para la foto. 

Nos alegramos de que esta extraña foto nunca pasara por la mesa de Hans Christian Andersen, o el reciente remake de La Sirenita de Disney podría haber sido muy diferente.

Este búho podría estar disfrutando de una broma con sus amigos, o a punto de cometer una matanza. La intensidad en sus ojos... nos da un poco de miedo.

Estos pingüinos rey pueden bailar la macarena mucho mejor que nosotros. Que bien que se han coordinado.

Hay quienes saben cómo inspirar miedo y demandar lo que necesitan con tan solo una sola mirada. Yo no me interpondría en su camino… 

Vamos a dejar que esta foto hable por sí misma. No nos fiamos de nosotros mismos para comentar... 

Esta paloma torcaz chilla al vacío con toda la ferocidad de un anciano jubilado pidiéndole a los niños que se vayan de su césped o una mujer despechada cantando a todo pulmón. 

Todos hemos sido como esta leonesa alguna vez. Así como cuando te toca sonreír en público, pero por dentro estas muerto de la rabia…

Un osezno curioso ha descubierto una pluma de águila y está contemplando en escribir su primera novela.

Con la cena en el pico, este pequeño está a punto de zambullirse en una horda de jóvenes muy hambrientos. Es casi como subirse al transporte público en hora pico. 

Un par de buitres orejudos se pavonean mientras el Parque Nacional Kruger de Sudáfrica les sirve de pasarela. Están listas para la próxima semana de la moda.

Este cachorro de león de tres meses intenta por todos los medios evitar caer de un árbol, pero no ha tenido mucha suerte. Menos mal que los gatos tienen nueve vidas.

A este pez ballesta Picasso no le gustó mucho la cena – su cena más reciente ha vuelto a salir a la superficie.

Un nilgo (también conocido como toro azul) se aventura demasiado cerca del nido de una grulla. El ave voladora más alta del mundo se prepara para atacar a este toro por detrás, y el resultado es esta toma con aire mitológico.

Esta mona hembra está llamando a sus hijos, aunque parece que ha hecho un gran chiste y no pudo contenerse.

Este salmón no va a ser la cena de nadie, ni siquiera de un terrorífico oso pardo. El pequeño pero poderoso pez abofetea a su depredador en plena cara.

Esta ardillita está desconcertada por lo que ha visto o quizás lo que ha oído. Parece que le interesa el chisme tanto como a nosotros. Queremos saber que oscuro secreto ha descubierto.  

No estamos seguros si estos dos wallabies están luchando, jugando o practicando para unirse al equipo de animadoras.

¡Si le cuentas a mamá lo que hice, te ahorco!

¡Otro amante del chisme! Este joven mono norigudo no puede creer lo que acaba de ver.

Este alce macho parece querer posar con su impresionante cornamenta, incluso le sonríe a la cámara. 

Este introvertido búho se esconde en la chimenea de una casa derruida. A juzgar por su expresión, no le gustan las visitas.

Este pingüino papúa está harto de su amigo y no está dispuesto a escuchar lo que tiene que decir. 

Esta cansada madre macaco cangrejero sueña con un necesario día de spa mientras su bebé se aferra a ella.

Este pingüino rey no está muy seguro de el disfraz de Halloween de su amigo – es un poco extremo.

¿Te apetece una copa? Este mono de Abha, Arabia Saudita, conoce sus mejores ángulos y está listo para invitarte a salir. 

¿Kung Fu ardilla? Esta ardilla roja salta por el aire durante una tormenta, y su dramática postura parece indicar que estamos a punto de presenciar una batalla épica y cinematográfica a cámara lenta.

Este elegante cisne está haciendo un buen trabajo tratando de calmar a quien se le ponga por delante. 

Un adorable pingüino corretea por el hielo. Quizá acaba de avistar un pez de aspecto apetitoso, o quizás está tratando de alcanzar el bus antes de que este arranque. 

Una lechuza curiosa intenta ver a hurtadillas el mundo exterior por primera vez, pero su madre lechuza no parece muy contenta. Parece que necesitan una casa un poco más grande.

Un mono salvaje da golpecitos a su compañero para asegurarse de que esta tomando una siesta después de la cena y que no está en coma de tanto comer. Sabemos exactamente lo que se siente. 

Este patito no piensa ensuciarse las patas. ¿Para qué nadar cuando puedes caminar por estos prácticos peldaños?

Este osezno no está preparado para cerrar el telón; se lo está pasando demasiado bien actuando ante un público que aplaude sus talentos.

Este zorro rojo americano parece estar coqueteando con nosotros, y esa sonrisa parece ocultar un interesante misterio. 

Esta cebra sueña con estar en un rodeo y ¿quiénes somos nosotros para impedir que cumpla sus sueños?

Perdida en sus propios pensamientos, esta garza ignora por completo que hay un hipopótamo bostezando justo detrás de ella, y que podría ser engullida fácilmente por sus fauces. También parece ignorar que está posada sobre el lomo de otro hipopótamo.

Este simpático mapache acaba de ser alimentado con gambas por el fotógrafo. No me extraña que esté tan contento.